Día de San Francisco Javier: una invitación a ser universidad en salida

En la Pontificia Universidad Javeriana Cali celebramos el Día de San Francisco Javier, patrono de las misiones y guía permanente de quienes creen en la fuerza transformadora del servicio. Su vida, marcada por un espíritu incansable y una fe que abrazó territorios lejanos, nos recuerda que la misión universitaria trasciende las aulas: es un llamado a caminar hacia quienes más nos necesitan.

Durante la Eucaristía realizada en comunidad, estudiantes, docentes, colaboradores y directivos nos reunimos para agradecer la vida de este gran misionero que, con profunda generosidad y sensibilidad humana, dedicó sus días a acompañar, escuchar y servir. Su ejemplo nos inspira a mirar nuestro entorno con los ojos de la compasión y a reconocer que cada persona es un encuentro sagrado.

San Francisco Javier nos enseña que la misión nace del movimiento: de salir de la comodidad, atravesar fronteras y asumir con valentía las realidades del mundo. En su legado encontramos la fuerza que sostiene nuestra propia identidad como universidad: una institución que se compromete con el país, que entra en diálogo con los territorios y que pone el conocimiento, la formación profesional y los talentos al servicio de las comunidades.

En la Javeriana Cali, esta misión se concreta en múltiples acciones que expresan ese espíritu “en salida”. Proyectos sociales que acompañan a poblaciones vulnerables; iniciativas de salud comunitaria; asesorías jurídicas a quienes más lo requieren; procesos culturales que dignifican la memoria de los barrios; voluntariados que permiten a nuestros estudiantes vivir de cerca la realidad del otro; y programas pastorales que cultivan la esperanza desde la presencia, la escucha y el cuidado.

Celebrar a San Francisco Javier es reconocer que nuestra tarea no termina en el campus. Somos una comunidad que aprende mientras acompaña, que se transforma mientras transforma, que escucha mientras sirve. Una comunidad que entiende que la misión ignaciana es siempre movimiento, apertura y entrega.

Hoy renovamos ese compromiso. Como él, queremos seguir caminando hacia aquellos lugares donde la vida clama, donde el conocimiento puede abrir caminos y donde la solidaridad se convierte en oportunidad.

Porque una universidad en salida no solo visita territorios: los abraza, los acompaña y se deja tocar por ellos. Y en ese encuentro, seguimos construyendo un proyecto educativo que honra nuestro legado, que reconoce la dignidad de todas las personas y que apuesta por un futuro más justo y humano.

San Francisco Javier, patrono y compañero de camino,
guía nuestros pasos donde más se necesita la luz de la esperanza.